domingo, 17 de enero de 2010

A veces, la desfachatez cunde más de lo que cuesta

Empiezo bien el dia. Después de una buena dormida de casi 12h, lo que menos me apetece es ponerme a hacer el deber. Ya lo haré en clase...
Muy graciosa la frase que nos dijo una chica que estaba recaudando dinero para el fin de curso de su clase ayer en la fireta de Muro:
¿Qué quereis a cambio de un euro?
I claro, nuestras mentes obscenas ya estaban imaginando lo típico. Estos adolescentes de hoy en dia...¬¬

Cambiando de tema. No os habéis fijado en que cuando te encuentras en el recibidor del edificio donde está el piso de tu amig@ y pasa una persona, siempre la tienes que saludar. Seguramente no seréis de esas personas que van saludando a los desconocidos por la calle (y si lo sois, os admiro muchísimo). Así que, ¿en qué cambia la situación? Únicamente por que estoy en un sitio más estrecho, ya sea el vestíbulo o el ascensor, ¿ya tengo que saludar a cada uno que pasa?
La conducta humana es indescifrable.

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