domingo, 3 de enero de 2010

Año distinto, misma rutina.

Si bien es cierto que un año cambia a la gente (yo, sin ir más lejos me he cortado el pelo) también es cierto que algunas cosas permanecen inalterables. Continuan habiendo las mismas fiestas de final de año con la típica musiquilla de bailar la conga pero nos hemos quedado sin la capa de Ramonchu por primera vez. Yo, al menos, la he echado de menos.
Ya ha terminado aquel torneo de Magic que mencioné en otro post y ganó el frikazo supremo. Y hoy mismo acaba de tener lugar el concierto de grupos jóvenes del pueblo. El rapero local Klei se ha traido a unos amigos de Alicante para deleitarnos otra vez con sus interesantes rimas, al tiempo que nos trata de hacer reflexionar sobre la manipulación informativa y el comportamiento juvenil sin valores morales que se puede apreciar al salir a la calle.
No me lo explico. Mucha reflexión, pero seguro que luego son ellos los primeros en saltarse esos supuestos valores. Vale que tienen que escribir su poesia sobre algo, pero creo que lo importante es la forma de hacerlo. Muchas veces ni siquiera se capta el mensaje. Pienso que esos sermones entre canción y canción se los podrian haber ahorrado. Eso sí, la improvisación ha sido magnífica. Zombies!!

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